Con el paso del tiempo nuestra piel va poco a poco perdiendo elasticidad, presentando cada vez más flacidez, aparecen las primeras arrugas e incluso alteraciones en la coloración y la uniformidad de su tono. Todos estos factores se pueden mejorar y ralentizar sin necesidad de recurrir a la cirugía ni tratamientos invasivos inyectables. En Fisbel conseguimos recuperar la turgencia y elasticidad de la piel con la descamación controlada de las capas de la piel y su posterior regeneración gracias a dos tratamientos fundamentales: indiba y los peelings químicos.
El tratamiento consta de varias sesiones con una frecuencia continuada aunque también se pueden realizar una o dos sesiones con el fin de provocar un efecto flash antes de un evento u ocasión importante.